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Revista Repique

Repique #8

Urgencia, hija del trauma

Gabriela Díaz

Hablar de agujero en el tiempo tras el período de pandemia parece irrisorio ¿Y ahora qué? ¿qué ha pasado con el tiempo? ¿de qué agujero hablamos? ¿del trauma, del troumatisme? Empezaré diciendo que agujero en el tiempo me remite a dos cosas: al nivel de lo traumático de cada uno, donde la falta de tiempo significante acompasa la irrupción de goce; y en relación a lo traumático generalizado respecto de la época, sean estos acontecimientos o síntomas. Me abocaré al primer punto.

Trauma y agujero van de la mano. Pero relacionemos agujero con urgencia y pensemos esta última como un corte en el tiempo que responde al advenimiento de un trauma (herida) siempre segundo en relación al traumatisme. Es en relación a esta primera herida o traumatisme de lalangue que se "acomodan" los siguientes episodios traumáticos, al modo de una marca que atraerá otras tal como el imán hace con el hierro. Se trata de un excesivo incremento de excitaciones en relación a la tolerancia del sujeto y su capacidad de controlar y elaborar psíquicamente estos excesos. "La posibilidad de que el goce se civilice, se separe, se distribuya, está dada por el ingreso de lalangue al cuerpo, pero a su vez ese impacto es causa de goce en exceso que parasita al parletre". (Traum∑, 2020, p. 126)

De la urgencia diremos: esa experiencia traumática que saca al sujeto de su rutina y lo fuerza a una nueva manera de hacer con lo real, es ese corte en un tiempo sin tiempo, displacentero. Y con ella, la angustia. El recurso de lo simbólico es lo que nos permitirá bordear, desplegar las coordenadas que orienten su resolución, hystorizando. Ahora bien, es lo simbólico lo que produce el borde del agujero tal y como nos enseña Lacan en el Seminario 7. No hay que pensar el agujero, nos aclara, como un espacio lleno que se agujerea al extraerle algo, es más bien lo simbólico produciendo el borde que conformará el agujero, "es el trauma, irrupción de goce, lo que produce un agujero en lo real"(Lacan, 1959, p. 74). Quedémonos con esta idea: agujero/goce/exceso. Reencontrar la palabra después de un trauma es producir un "reconocimiento del trauma particular, el de cada uno que permita ir hacia una distancia psíquica con relación a él" (Laurent, 2022). Recordemos que la temporalidad del trauma es un fuera de tiempo y que, para cada sujeto, el valor traumático es siempre singular. Que lo real del trauma se reduzca por lo simbólico no es más que el alivio producido en el análisis tras su elaboración. La viñeta del caso que sigue pone en evidencia, más que lo urgente, lo traumático como una fuerte conmoción de los semblantes donde un mal encuentro deja expuesto el punto de falla en la trama de sentido en la que se vive, la historia parece detenerse y la angustia se manifiesta.

Antonella, 16 años, viene muy angustiada por un episodio que pasó hace meses. El pasaje del colegio privado al público tras pandemia la encontró con nuevos mejores amigos, un asunto que le cambió la vida. Hasta que pisa el palito, o más bien, mete de lleno la pata en el agujero de sus series traumáticas: envestida por una peculiar ingenuidad no se le ocurre mejor idea que confesar a una amiga lo mucho que le gusta su novio (el de ésta, claro). Antonella terminará contándole a su propio novio que le gusta ese chico, amigo de él. A los pocos días su noviazgo se cortó y la amistad con esta amiga se esfumó. No volvió a ser la misma. Su flamante red de amigos desapareció. A partir de allí se sume en un estado generalizado de desánimo y angustia. La culpa por la ocurrencia de aquella tonta confesión la atormenta; y el significante ingenua le angustia. Se disculpa conmigo por la tontería con la que viene, insisto en que no es ninguna tontería y que entiendo su disgusto. Tras la primera sesión se alivia. Doy todo el lugar a los planteamientos que hace: incomodidad ante cualquier espacio o vínculo, aislamiento y la creencia de haber perdido la capacidad de sentir. Intervengo diciendo que de ninguna manera es eso y apunto a otra cosa. Es en el relato de sus interminables disculpas que ubica algo de la repetición: desde siempre hace y dice lo que piensa que los otros quieren escuchar.

Un S1 y un recuerdo: Surge un S1, la niña buena. Me sorprendo. Quiero saber. Tras largo silencio dice: crecí creyendo que soy una niña buena. Luego un recuerdo: en el jardín de infantes la insistencia de otra niña le dejan huella: si no haces esto que te digo, no sos más mi amiga.

El mandato superyoico de la niña buena se funde en un abrazo con la búsqueda de aprobación que terminará derivando en la falta de decisión de la que se acusa. Estamos ante la perdida de una estabilidad emocional que implica el lazo con los otros en un tiempo determinado. No resultó fácil ubicar cómo era su vida antes del cambio de colegio, hay allí un agujero en el tiempo que es incapaz de significar. Sólo tras varias sesiones podrá localizar la pérdida de referencias y el duelo por el cambio de colegio, la soledad de la pandemia y ese entusiasmo desbordante por los nuevos mejores amigos que luego desaparecerán. A. nombra el desajuste del episodio por el que viene como un cambio brusco que la descarriló y ubicará su temor/miedo, casi pánico, a que le vuelva a pasar lo mismo. En este punto recuerdo lo que Lacan dice de la angustia en La Tercera, que es "un miedo al miedo"(Lacan, 1974, p. 18). Por fortuna y después de 3 meses, estamos en otro momento. "No se trata de ayudar al sujeto a tapar la falla que se ha abierto en su existencia, sino de enseñarle a moverse a su alrededor sin caer adentro"(Focci, 2012, p. 83). Y agrego: tejiendo un borde al agujero con el significante y no sin el tiempo.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

  • Balseiro, A. El toro, introducción a la topología del sujeto en Lacan. Punto de Fuga. Revista digital de la sección clínica de Madrid. Recuperado de: https://puntodefugarevista.com/el-toro-introduccion-a-la-topologia-del-sujeto-en-lacan/#:~:text=El%20toro%20–como%20se%20llama,primero%20que%20nunca%20se%20alcanza.
  • Dessal, G. (2019) Inconsciente 3.0. Lo que hacemos con las tecnologías y lo que las tecnologías hacen con nosotros. Colección + otra. Xoroi Ediciones.
  • Fochi, M. (2012). Síntoma sin inconsciente de una época sin deseo. Cuatro miradas sobre la clínica contemporánea. Buenos Aires. Ed. Tres Aches
  • Freud, S. (1893-95) Estudios sobre la histeria. Ed. Amorrortu. XVIII
  • Lacan, J. (1998) La ética del Psicoanálisis (1959-1960). Ed. Paidós.
  • Lacan, J. (2015). La tercera. Revista Lacaniana n° 18. Buenos Aires. Publicación de la Escuela de Orientación Lacaniana.
  • Laurent, E. (2022) El revés del trauma. Recuperado de: https://www.revistavirtualia.com/articulos/696/destacados/el-reves-del-trauma
  • Seldes, R. (2019). La urgencia dicha. Buenos Aires. Ed. Colección Diva
  • Traum∑, Conversación EOL 2020. Colección Orientación Lacaniana. Ed. Grama
  • Tudanca, L. (2012) Una política del síntoma. Buenos Aires. Ed. Grama