Repique #8
La Familia: un lugar de interpretación inagotable
Lacan inicia su enseñanza refiriéndose a las configuraciones familiares destacando su valor simbólico y finalizó destacando su valor imaginario, como lugar de transmisión del malentendido fundamental del lenguaje que impone lalengua en cada uno. Es una creencia que somos dueños de nuestras palabras. La lengua es un tema de familia. Ese lugar del Otro que traduce la necesidad en deseo, tiene efecto de trauma, genera un resto, siempre algo quedara sin poder pedirse.
Miller además ubica que la familia ya no tiene su origen en el matrimonio, sino en el malentendido, en el desacuerdo, en la decepción, en el abuso sexual o en el crimen. No la entendemos como padre, madre e hijos, sino por el NP, el DM y los objetos a. No la leemos unida por lazos legales y obligaciones, sino unida por un secreto, de que gozan padre y madre.
La familia siempre estará en crisis, porque es una respuesta a algo que no funciona por estructura, es un modo de suplencia ante la inexistencia de la relación sexual, ante el agujero central. Además es un síntoma, una forma de anudar aquello que de entrada esta desanudado. Lacan ubicó la relación entre síntoma y civilización cuando plantea los efectos de la declinación de la imago paterna. Los síntomas de cada sujeto y lo social están vinculados. ¿Las nuevas configuraciones son efecto de esta declinación? En su escrito Notas sobre el niño, plantea la importancia de que el deseo sobre el niño no sea anónimo, y que las funciones que van más allá de la forma familiar. La función materna será por la vía de sus propias carencias y la función paterna en tanto nombre, vector de encarnación de la ley en el deseo, trasmite una regulación del goce. Y ubica las respuestas dadas por el niño, como falo de la madre, síntoma de la pareja parental o como objeto del fantasma materno. ¿Aún siguen siendo estás las respuestas?
No hay familia tipo sino tipos de familias. Ensambladas, clásicas, separadas, unidas, de parejas homosexuales, por inseminación artificial a las más diversas. Lo importante es no confundir la forma con que hay un real de cada familia y como se inserta cada niño en ese sistema, a distancia de los ideales. Las configuraciones actuales ponen en evidencia nuevas distribuciones, y ha traído un neologismo, parentalidad, que reposa en la idea de igualdad, acorde a la declinación del padre. Se separa cada vez más lo simbólico de la filiación y el objeto niño más elevado a objeto a.
Hacerse cargo y Tutela transitoria
Muchos niños llegan a consulta con otros que no son sus padres, solicitan o son derivados por juzgados, médicos, sistemas de protección. Son vecinas, tías, abuelas, con lazos de parentesco o sin filiación alguna. Fueron separados de sus padres por abusos, desamparo, negligencias o privación de libertad de madre o padre. Nada nuevo bajo el sol, lo nuevo que observo es el aumento de niños que vivían con ambos padres pero en determinado contexto. Son hijos de traficantes y adictos. Nacidos o viviendo en lo que socialmente se define Bocas de Venta. Son retirados una vez se desarma esa boca. Se desarticula el negocio, se desarticula la familia.
Martin de tres años es traído por su abuela paterna. Fue retirado cuando detienen a sus padres por venta y tráfico, ambos consumían. La casa de Martin era una boca que se lo estaba tragando. La abuela no conocía a su nieto, se lo entregan de pañales, lenguaje pobre, descuidado y asustado. Mas en estado de sobre viviente que de hijo. Su mirada es de terror, evita el contacto. Mientras escucho a la abuela me acerco. Escondido bajo el escritorio solo repite milico patada, milico patada. Desde esos significantes intervengo, presto palabras a lo innombrable. Me pide le haga un barco de papel, luego un avión, los acerca y aleja, mientras responde un rotundo no ante la pregunta de ver a sus padres, y dibuja unas rayas que nombra grúa, la grúa que sostiene al barco y al avión. Tiempo de alojar y sostener esta nueva familia ¿transitoria?
Estos armados son dispuestos por el orden social, de hierro, que no toma en cuenta que el deseo no sea anónimo, ni la trasmisión, ni la nominación, ni el Deseo Materno mucho menos el Nombre del Padre o la regulación del goce. El Estado establece que pasen al cuidado de otros transitoriamente mientras los padres estén privados de libertad o deambulando errantes por el consumo, pero no son adoptados.
Martin dejo los pañales, se expresa claro, se identifica a la lengua maternoabuela, de la cual ahora no puede separarse, juega, los vecinos lo miman. Está en familia, pero desde la prisión reclaman al pequeño objeto.
¿Hasta dónde un niño puede tolerar esta transitoriedad, cómo acompañar estos armados, que orientación, qué tipo de analista partenaire es necesario, cómo maniobrar con el discurso jurídico y el goce familiar que los reclama? Qué posición sino la de un analista que se hace cargo de intervenir en lo real, que sostenga, regule, limite, empalme como cuarto redondel los registros, que se haga cargo de proteger a los niños "del infanticidio secreto que es el deseo muerto oculto en el lazo familiar" (Laurent). Siempre estará en última instancia con lo que cada sujeto niño responda, en el mejor de los casos con su síntoma, fantasma, identificaciones y decisiones. Con su propia ficción de familia, que no deja de ser como toda familia un invento transitorio.
BIBLIOGRAFÍA
- Lacan, Jacques (1938) La familia, editorial Argonauta, Buenos Aires
- Lacan, Jacques (1974-1975) Seminario 22, RSI, EFBA, Buenos Aires
- Laurent, Eric, (2018) El niño y su familia, Colección Diva, Buenos Aires
- Miller, J. A, (2007), Cosas de familia en el inconsciente, Revista Medio Dicho, EOL, Buenos Aires.
- Sánchez, Blanca, (2021) Modos de hacer familia, Cuaderno Nro. 27, ICdeBA, Buenos Aires.